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null Nueva Movilidad, nuevos riesgos: En la próxima década podría haber un 18% más de fallecidos

NOTICIA - Informes

15/06/2022

Nueva Movilidad, nuevos riesgos: En la próxima década podría haber un 18% más de fallecidos en accidentes de tráfico

Todos lo hemos apreciado: desde hace unos años, el ecosistema de la movilidad ha cambiado radicalmente en las ciudades españolas. Del protagonismo absoluto de los los coches se ha pasado a un gran número de alternativas que ha convertido a la movilidad en un proceso muy variado y multimodal. Pero… ¿qué riesgos conllevan estos cambios?

En este sentido, el surgimiento del sharing, la proliferación de vehículos de movilidad personal, el cierre de los centros históricos de las ciudades a los vehículos más contaminantes y los cambios socioeconómicos experimentados por los más jóvenes, que ya no ven al vehículo como un bien aspiracional, han propiciado la aparición de un gran número de alternativas más racionales y ecológicas en las ciudades. 


De hecho, el 72% de los ciudadanos de nuestro país afirman que han cambiado su forma de desplazarse en los últimos tiempos y, desde 2008, el número de nuevos permisos de conducir ha descendido un 51%. La conclusión es sencilla: hemos cambiado radicalmente la forma de desplazarnos por nuestras ciudades. 


Sin embargo, no todo son buenas noticias. La coexistencia de estos nuevos medios de transporte con los tradicionales puede agravar aún más la mala evolución que ha experimentado la accidentalidad urbana en los últimos años, ya que en la última década el número de accidentes en ciudad se incrementó un 42%, produciendo casi 4.700 muertos. Además, los usuarios vulnerables ya suponen el 80% de las víctimas mortales en ciudad, de los cuales, los ciclistas y los usuarios de VMP, ya constituyen el 10% de fallecidos. 


Teniendo en cuenta todos estos factores, la pregunta se hace sola: ¿cómo influirán estos cambios en las cifras de accidentalidad urbana del futuro? Una duda que la Fundación Línea Directa ha tratado de despejar en su último estudio: “Nueva Movilidad urbana y seguridad vial. Accidentalidad en la nueva cultura del desplazamiento”


¿Pueden empeorar aún más las cifras?

Uno de los elementos más reconocibles de la nueva movilidad es, precisamente, los vehículos de movilidad personal (VMP); una forma de desplazarse rápida, sostenible y racional en el centro de las ciudades. Pero sin duda, el desconocimiento de las normas, la falta de experiencia en su manejo, las imprudencias de algunos y la difícil convivencia de estos vehículos con el resto de los usuarios de la vía pueden suponer un riesgo en materia de seguridad vial. 

No en vano, 17 millones de españoles (44%) reconocen ser usuarios habituales u ocasionales de un VMP o de una bicicleta eléctrica y un 60% ve probable usarlos a corto plazo. Las principales razones: el precio del combustible, las restricciones urbanas a los coches y el coste de los coches eléctricos, que el 70% de los españoles considera “inalcanzables”.

Además, según el estudio de la Fundación Línea Directa, el 50% de los usuarios de VMP reconoce que circula sin casco, el 73% lo hace en alguna ocasión por la acera y el 45% ha sobrepasado en alguna ocasión los límites de velocidad establecidos para estos vehículos (25 Km/h). Con todo, no es de extrañar que los usuarios de patinetes eléctricos sean los conductores con peor imagen: solo el 14% de los encuestados creen que cumplen habitualmente las normas.

Esta circunstancia, unido al auge del uso de la bicicleta, podría tener una consecuencia preocupante: de no seguirse las recomendaciones y normas de la DGT, la nueva cultura del desplazamiento urbano podría causar 5.500 muertos en las ciudades españolas entre 2021 y 2030, lo que supondría 831 víctimas más que en la década anterior (+18%). Además, de mantenerse la tendencia actual, la accidentalidad urbana podría superar al final de la presente década los 700.000 siniestros (+24%) y el número de lesionados las 850.000 víctimas (+22%).