Seguridad Vial

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NOTICIA - Seguridad Vial

22/12/2022

Curiosidades de la Seguridad Vial (II)

Con la finalidad de conocer más sobre la historia de la seguridad vial y de la movilidad humana, la Fundación Línea Directa ha inaugurado una serie de entradas en su blog sobre las curiosidades que rodean este ámbito de conocimiento. El objetivo es difundirlo y ponerlo en valor, ya que presentarlo como un tema divertido e interesante también puede contribuir a divulgarlo y a luchar contra los accidentes de tráfico. Esta es la segunda entrega.

I

La anterior entrada sobre curiosidades relativas a la seguridad vial la dejamos en manos de los romanos. Volvemos a ellos. Este prodigioso pueblo aportó un gran número de ideas a la ingeniería y al transporte, como las restricciones del tráfico en las ciudades y una red viaria centralizada. De hecho, no pocas de nuestras actuales autopistas y carreteras están construidas sobre antiguas calzadas romanas. Quizás el ejemplo más conocido en España es la N-340, que sigue parte del trazado de la antigua Vía Augusta y que cuenta incluso con su propio arco de triunfo, el Arco de Bará, situado en una isleta en el centro del trazado a la altura del municipio tarraconense de Roda de Bará. 

II

Otra de las principales aportaciones de los romanos fue, sin duda, los pasos de peatones. En la ciudad de Pompeya, cerca de Nápoles, pueden verse aún. Son piedras sobreelevadas y rectangulares colocadas longitudinalmente en la calzada, dejando espacios para que pudieran pasar los carros entre ellas. En la época contemporánea, su origen se remonta a 1951 y se atribuye al ingeniero George Charlesworth y su equipo. Observando el tráfico, los técnicos se dieron cuenta de las grandes dificultades que tenían los peatones para cruzar la calle, por lo que propusieron establecer un paso seguro para ellos. Tras varias propuestas, que incluyeron soluciones de todo tipo, se acabó imponiendo el diseño actual, que contó con un gran éxito y que fue determinante para que el ingeniero inglés fuera nombrado Director de Tráfico. Tras la iniciativa, muy aplaudida en su tiempo, Charlesworth fue conocido como “Doctor Zebra”.

III

Abandonamos Roma, pero sin salir de la antigüedad. La primera multa de tráfico se atribuye tradicionalmente a los egipcios y la recibió un conductor de carro en estado de ebriedad que, al parecer, chocó con una estatua. En la edad contemporánea, la primera sanción de la que se tiene noticia se impuso en Inglaterra en 1896, en Kent. El multado fue Walter Arnold por ir con su vehículo a la velocidad de 13 km/h y fue perseguido por un policía en bicicleta que tardó un buen rato en darle alcance, quizás por ir cuesta arriba. El denunciado hubo de comparecer frente a un juez, que le castigó con una multa de un chelín.   

IV

Desde entonces, las multas, impopulares pero necesarias, han cambiado mucho. En este sentido la multa de tráfico más elevada de la historia se impuso en Suiza, país que suele sancionar a los conductores no solo en función de la gravedad de su conducta, sino también por su capacidad adquisitiva. De esta manera, un ciudadano sueco fue sancionado en 2017 por conducir su flamante deportivo a 290 km/h con la nada desdeñable cantidad de 700.000 euros. No sabemos si volvió a reincidir.